Guillermo Ayoví Erazo, o también conocido como Papa Roncón, es uno de los máximos exponentes y representantes de la cultura afrodescendiente que se encuentra en nuestro país, el Ecuador. Es nacido el 10 de noviembre de 1930 que desde su niñez demostró una gran pasión hacia la música donde se volvió en el mejor artista de Marimba; un género el cual consiste de un xilófono con
resonadores donde es originalmente de África, por lo tanto, tuvo su auge en Latino América, inicialmente en México y Guatemala.
En el año de 2001, Guillermo Ayoví recibió un premio Eugenio Espejo por su contribución a la cultura ecuatoriana por su paciente docencia en la Marimba para los niños ecuatorianos, así también enseñando a bailar a dichos de sus estudiantes. Él también ha realizado varias películas. También la mayoría de sus canciones son composiciones que hacen alabanza a la naturaleza, a los montes, a la lavandera o cualquier situación que sea conmovedora para el alma. Porque la marimba es su señal de identidad, su memoria, “lo que los sacó a ellos (se refiere a sus antepasados) de la esclavitud.” Exponiendo a sus antepasados los cuales sufrieron demasiado, por lo tanto él intenta divertirse lo que sus antepasados no pudieron hacer.
Lo comenta en su modesta casa en Borbón, un poblado que se levanta al pie de la confluencia de los ríos Santiago y Cayapas, de unas cuantas calles adoquinadas y la mayoría todavía de tierra, donde Papá Roncón reside con su esposa, Grimalda, con la que lleva unido más de 50 años y con quien procreó diez hijos, todos profesionales, según cuenta con orgullo, y que le han dado 20 nietos y varios bisnietos. La menor de sus hijas es la teniente política del pueblo.
Autor: Emilio Sebastián Tapia
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